Panorama del clima intelectual actual

Los extraordinarios acontecimientos de 2020 han hecho que mucha gente se pregunte si estamos viviendo una nueva era. Tiempos de cambio y conflicto como este suelen provocar que la gente se plantee preguntas filosóficas.

Así que, al considerar este tiempo presente en el que nos toca vivir, les invito a considerar dos preguntas de sondeo:

Si nuestro tiempo es realmente distinto, ¿cómo lo describirías? En otras palabras, ¿qué ideas, creencias y valores significativos reflejan de forma exclusiva nuestro clima cultural actual?

Curiosamente, los alemanes tienen un término filosófico especial para esta reflexión: zeitgeist. Significa “el espíritu de la época”. Procedente de las palabras alemanas zeit, que significa “tiempo”, y geist, que significa “espíritu”, hace referencia a lo que los filósofos denominan la atmósfera intelectual, moral y cultural general de una época determinada.

Una persona que creo que tiene una buena visión del zeitgeist de nuestra época es Robert P. George, profesor de Jurisprudencia (cátedra McCormick) y director del Programa James Madison de Ideales e Instituciones Americanas de la Universidad de Princeton. Escuché al profesor George dar una conferencia en la Trinity Law School del sur de California hace unos años. Fue un honor escucharle y poder hacerle preguntas personalmente al final de su charla. En una época repleta de opiniones y perspectivas diversas, lo recomiendo como un erudito fiable que escribe con cuidado y franqueza sobre cuestiones culturales desde la perspectiva de una cosmovisión histórica cristiana.

A continuación, les presento tres de las provocadoras reflexiones del profesor George sobre la educación, la cultura y la naturaleza humana que, en mi opinión, captan aspectos importantes del clima y el debate actuales. Luego, ofrezco algunos breves comentarios aclaratorios. Al leer estas citas, podrás comprobar si el profesor George ha puesto el dedo en la llaga en los temas clave de la actualidad. También pregúntate qué piensas sobre estos temas. He utilizado estas observaciones para suscitar un debate filosófico profundo, especialmente en las redes sociales.

1. ¿La universidad proporciona educación o adoctrinamiento?

“¿Por qué la gente no puede entender la diferencia -y la importancia de la diferencia- entre la educación (buena) y el adoctrinamiento (malo)? Esto NO es difícil. No es una ‘línea fina’. Enseñar a los jóvenes CÓMO pensar (de forma cuidadosa y crítica) es diferente a decirles QUÉ pensar”.¹

La educación es la búsqueda y el descubrimiento del conocimiento, la verdad y la sabiduría a través del análisis crítico. El objetivo de la educación es que el alumno desarrolle la capacidad de formarse un juicio independiente y razonable sobre los temas estudiados.

El adoctrinamiento, por otro lado, puede significar la mera instrucción en un tema determinado, pero a menudo conlleva el significado peyorativo de inculcar ideas de forma acrítica. El adoctrinamiento está más cerca de la propaganda que de la educación.

Como señala George, una buena educación enseña a los estudiantes a pensar en lugar de decirles lo que tienen que pensar. Gran parte del debate actual en nuestra cultura sobre las políticas de identidad (los temas controvertidos relacionados con la raza, el sexo y la clase social) proviene de los campus universitarios. Pero, en general, ¿las universidades actuales educan o adoctrinan?

Un enfoque aceptable del aprendizaje reconoce el reto que suponen los prejuicios y las predisposiciones humanas y trata de promover una apertura mental razonable, una imparcialidad y una equidad básica al considerar los temas. Pero el descubrimiento del conocimiento genuino y de la verdad sobre la vida y el mundo rara vez está exento de controversia y desacuerdo entre las personas. Por eso, cuando los temas se dividen entre posiciones viables, un modelo educativo sólido expone a los alumnos a un debate imparcial de ambas partes (incluidos los pros y los contras) de una cuestión controvertida. Por desgracia, la propaganda tiende a tener una perspectiva manipuladora y unilateral.

2.¿Qué mentalidad caracteriza la época cultural actual?

“Si el período medieval fue ‘la Edad de la Fe’, y la Ilustración fue ‘la Edad de la Razón’, nosotros vivimos en ‘la Edad de los Sentimientos'”.2

El zeitgeist actual suele poner mucho énfasis en cómo se siente la gente sobre las cosas. Algunos incluso definen la realidad en función de cómo afecta algo a su estado emocional (lo que se denomina “posverdad”). Esta mentalidad orientada a los sentimientos es común en las instituciones educativas de hoy en día, como donde el profesor George enseña en la Universidad de Princeton, de la Ivy League, lo que a su vez influye en la conversación social más amplia.

Sin embargo, aunque las emociones son una parte importante y saludable de nuestra humanidad, los sentimientos subjetivos deben ser probados por los hechos objetivos y la razón.

3. ¿Cómo se explica la depravación humana?

“Aunque no creyera en Dios, creería en Satanás y en el infierno. No hay otra palabra para describir el tráfico de niños -miles de ellos- hacia la prostitución que no sea ‘satánica’. Y seguramente el infierno espera a los responsables de tan condenable crimen”. 3

Aunque el secularismo parece estar creciendo, especialmente en las instituciones académicas del mundo occidental, todavía hay un principio bíblico fundamental que es prácticamente imposible de negar. Se trata de la depravación moral de la humanidad. La verdadera maldad que se encuentra en el mundo y en los seres humanos significa que vivimos en un universo moral que clama por la justicia. Aunque el problema del mal se ha visto tradicionalmente como un argumento contra la existencia de Dios, en realidad puede ser una poderosa prueba de un Dios que exige justicia.

Tanto si se aceptan como si se rechazan las perspectivas de George, creo que ha identificado y explorado algunas de las temáticas fundamentales que reflejan nuestro actual clima cultural.

Reflexiones: Tu turno

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